Implementar una estrategia comercial que se adapte a este entorno de incertidumbre y continuos cambios, parece todo un reto para cualquier empresa en la actualidad.
Sin embargo, es importante definir y elaborar una estrategia comercial de éxito que nos permita alcanzar nuestros objetivos y hacer crecer nuestro negocio.
En este post te dejamos 5 ideas para que una estrategia comercial funcione en las PYMES.
1. definir tu misión y visión
¿A dónde queremos llegar? ¿Qué nos proponemos a largo plazo? Muchas PYMES carecen de una meta realista que se pueda conseguir en un tiempo razonable. Sin embargo, nadie sabe mejor que nosotros cómo queremos que sea la imagen de nuestra empresa en un futuro, ¿tal vez cómo aquella empresa que ofrece los productos de mejor calidad? o ¿cómo esa empresa que siempre tiene la tecnología más avanzada?
2. crear líneas estratégicas basadas en los objetivos que queremos alcanzar
Es importante definir unas líneas estratégicas que se dirijan a la consecución de los objetivos de la empresa. Establecer unos objetivos claros, realistas y alcanzables nos ayudará a lograr las metas propuestas y crear una estrategia comercial de éxito en la actualidad.
3. elaborar una buena propuesta de valor
¿Has pensado alguna vez en lo que le aporta tu empresa al cliente? ¿Por qué eligen tu producto o servicio y no el de la competencia? Crear una propuesta de valor puede ser el impulso que necesitan muchas PYMES para despertar el interés en el mercado.
4. diferénciate del resto
Conoce a tus competidores y busca tu ventaja competitiva en el mercado. Hazte hueco en la competencia, puede ser por la exclusividad de tus productos o servicios, por los precios que ofreces o incluso por el mercado en el que estás especializado. La diferenciación de una PYME se consigue cuando nuestro producto o servicio ofrece unas características distintas y tiene un valor añadido a lo que ofrecen nuestros competidores.
5. mide tus resultados con un mapa estratégico
Al igual que es importante crear una estrategia comercial que se ajuste a la realidad de la empresa, habiendo definido la misión, valores y líneas estratégicas, e incluso la propuesta de valor, también es necesario tener un sistema que nos permita medir y controlar la planificación estratégica. Por ejemplo, un mapa estratégico, que ofrece una representación visual de la estrategia comercial y puede marcarnos una ruta a seguir.
Sin embargo, por muy bien definida que tengamos nuestra estrategia comercial, no nos olvidemos que ésta se tiene que ir adaptando a los cambios del entorno pues, incluso antes de la pandemia, vivimos en una situación de continuo avance tecnológico que nos obliga a tener una estructura cada vez más flexible.
Por ello, es fundamental mantenernos al día de todo lo que ocurre en nuestro sector y que mejor que tener toda la información de la actualidad recopilada en una misma plataforma.
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